9 de marzo de 2016 – San Juan, Puerto Rico- La candidata a la gobernación del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), María de Lourdes Santiago, declaró hoy que la determinación del Juez del Tribunal de los Estados Unidos en Puerto Rico, Juan Pérez Giménez, en el caso Obergefell v. Hodges 576 U.S. (2015) es “abosolutamente desacertada en derecho y muestra, además, la voluntad de discrimen y marginación que persiste en ciertos sectores del país”.
A tales efectos la Senadora independentista instó al Secretario de Justicia -mediante carta entregada en la mañana de hoy- para que “sin mayor dilación imparta instrucciones e indique a la judicatura puertorriqueña, al Registro Demográfico y a cualquier otra entidad gubernamental pertinente, a que prevalece el estado de derecho resuelto en la determinación del Tribunal Supremo en el caso de Obergefell vs. Hodges y no la determinación de un Tribunal inferior dentro de la jerarquía del gobierno de los EE.UU. como es el Tribunal Federal en Puerto Rico”.
En dicha misiva la Senadora Santiago solicitó, además, a no cancelar la celebración de bodas entre personas del mismo género ni a deternese los trámites conducentes a ellas o aquellos relacionados al reconocimiento de tales matrimonios celebrados en otras jurisdicciones ni de manera alguna interferir con los derechos de los matrimonios ya realizados en Puerto Rico.
De la misma manera, la Portavoz del PIP en el Senado urgió a la mayoría legislativa a que se aprueben, tan pronto como la próxima semana, los proyectos de ley ya radicados para derogar el artículo 68 del Código Civil -que actualmente no reconoce los matrimonios entre personas del mismo género- para que de esta manera se convierta en una declaración de l@s puertorriqueñ@s el reconocimiento de la igualdad de todos los seres humanos.
Por último, la líder independentista demandó de todos los candidatos a la gobernación a asumir una posición clara en el tema de la igualdad de derechos y, en el caso del Dr. Bernier, precisó que corresponde que sin ningún retraso y de forma inmediata disponga para que su delegación -que es mayoría en Cámara y Senado- apruebe los proyectos presentados por miembros de su propio partido para permitir el matrimonio entre personas del mismo género.