3 de febrero de 2016 – El Capitolio – Durante el interrogatorio de la Senadora María de Lourdes Santiago al presidente de la UTIER, Ángel Figueroa Jaramillo, como parte de la Vista Pública de la comisión senatorial especial que investiga la compra de combustible en la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), surgió información sobre ciertas determinaciones tomadas por Lisa Donahue, oficial de reestructuración de la corporación pública, que podrían implicar costos innecesarios e incluso afectar la estabilidad de la generación de energía.
“Debe ser objeto de cuestionamiento la práctica adoptada por la AEE a instancias de la Sra. Donahue, expuesta hoy por el presidente de la UTIER en respuesta a mis preguntas, según la cual la Autoridad está limitando al extremo la compra de combustible, para que se refleje un ahorro artificial, al costo de reducir peligrosamente la reserva con la que debe contar la AEE”, indicó la senadora Santiago.
De acuerdo a lo declarado por Figueroa Jaramillo, la importante reducción en los abastos de combustible, fuerza a la quema de las cantidades residuales disponibles en los tanques, lo que obliga a la Autoridad a cambiar con frecuencia inusitada los filtros de las turbinas, con el correspondiente costo.
Antes de la llegada de la Sra. Donahue, era práctica de la AEE contar con una reserva de combustible para generación de energía de al menos treinta días. Bajo las nuevas directrices, se ha hecho necesario “salir corriendo a buscar barcazas”. Figueroa Jaramillo alertó que el traslado urgente de combustible, en particular a la Central Cambalache, por la vía terrestre, ha representado costos muy superiores a los que implica suplir los abastos por la vía marítima, como solía hacerse.
Además, se denunció la virtual inoperancia de puestos de la alta dirección de la AEE, cuyas funciones han sido usurpadas por una “estructura administrativa parelela” que supera los cuarenta funcionarios, todos bajo la tutela directa de la Sra. Donahue. Relató el presidente de la UTIER, que, de hecho, el grupo de empleados de la oficial de reestructuracióhn, llegan y se marchan juntos a la sede de la AEE.